Imagen de Niki K
Hoy no tocaba una entrada así, pero como casi siempre en la vida, la muerte no avisa de su llegada, y el pasado día 16 de septiembre fallecía el jurista cántabro Eduardo García de Enterría.
Para los que no estéis metidos en temas de Derecho, es decir, la mayoría de los lectores de «El Administrado 2.0», este nombre probablemente no os resultaba muy familiar hasta hace unos días, pero era uno de los grandes del Derecho Administrativo español. Autor de infinidad de libros y artículos, catedrático por la Universidad de Valladolid y la Complutense de Madrid, y miembro de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, así como de la Real Academia Española (era la letra «U» mayúscula). Es más, fue el primer juez español en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y le fue concedido un Premio Príncipe de Asturias hace casi 30 años. Casi nada.
Pero no voy a explayarme aun más cantando sus múltiples logros en el campo del Derecho Público. Otros lo han hecho ya más y mejor. Pero es que su influencia en el Derecho actual español es innegable.
Tanta fue su importancia en la formación de los juristas actuales españoles (muchos son los profesores y profesionales que no dudan en calificarle de maestro), que yo misma no puedo más que reconocer su influencia en mi formación a través de mis profesores y lecturas, y esta se reflejó en este mismo blog desde su nacimiento, ya que, aunque «El Administrado 2.0» está pensado para acercar el Derecho al común de la gente, su propio nombre se decidió en contra de la conocida opinión de este autor, contraria a mantener el uso del término «administrado» en la relación ciudadano/Administración Pública, al considerar que llevaba consigo un lastre histórico y semántico demasiado grande.
Así que, desde aquí, no podíamos sino sumarnos a todas las despedidas que están apareciendo en la Red para recordar su trabajo y su figura dentro del Dercho.
D.E.P.
Marta Lanza es una asesora jurídica especializada en los procedimientos con la Administración, tanto que, actualmente, se encuentra opositando para poder trabajar directamente en la modernización de la Administración y lograr que la relación entre administrado y Administración sea ágil y sencilla, ya sea "en persona" como a través de una pantalla.
